Tuesday, May 3, 2011

May | 03 | Aprovechando una lección de matemáticas para topos con problemas de memoria

Palabra para meditar – SEGURO

2 Pedro 1:10
“Por lo tanto, hermanos, esfuércense más todavía por asegurarse del llamado de Dios, que fue quien los eligió. Si hacen estas cosas no caerán jamás.”

Aprovechando una lección de matemáticas para topos con problemas de memoria


Nosotros los Protestantes contra el abuso espiritual, y contra las tortuosidades doctrinales; sí, nosotros los reformadores de una previa y terrible parodia de la religión pura, ahora colgamos nuestros sombreros de seguridad y esperanza, utilizando cinco pinzas gigantescas, siendo éstas:

1 Sola Scriptura (“sólo por la Escritura”)
2 Sola Fide (“sólo por la Fe”)
3 Sola Gratia (“sólo por la Gracia”)
4 Solus Christus (“sólo Cristo”)
5 Soli Deo Gloria (“sólo a Dios la Gloria”)

¡Qué maravilloso!

Por lo tanto, es una verdadera vergüenza que la elaboración de estos cinco pilares centrales del Protestantismo, del Cristianismo bíblico, haya conducido, en general, a un cristiano “holgazán” e incipiente. Nos hemos acomodado demasiado con el que alguna vez fuera un matrimonio maravillosamente sencillo entre la fe y la gracia, que parece en estos tiempos haber dejado de producir hijos vigorosos, respetuosos, agradecidos y sacrificados, y haberse quedado de alguna manera con un desagradable nido de cucús gorjeantes, hijos obesos, quienes en su posterior crecimiento postmoderno y sedentario manifiestan muy poca relación con la revelación de la Escritura, que tan hermosamente alguna vez proclamó aquel matrimonio entre la fe y la gracia. Así, como consecuencia, no tienen corazón ni inclinación, no tienen agallas ni aguante, ni para saber cómo deberían ser o desear llegar a ser, ni para saber por qué deberían estar decididos a morir. Esto tiene que corregirse. Nosotros los Protestantes nos hemos ablandado.

Nuestro texto para esta noche se basa en un “por lo tanto”. Entonces, revisando los versículos anteriores de la introducción de la segunda Carta de Pedro, vemos que hablan de una multiplicación de una gracia divina y de la paz, lo que a su vez resulta en sobreabundancia de una obra fructífera y fiel. El texto de 2a. Pedro 1: 5-9 es, de hecho, una lección de matemáticas para topos ciegos con problemas de memoria, arraigada en la sobreabundancia de las promesas de Dios y por lo tanto encabezada con una frase de acción exigente e integral, traducida como “poniendo toda diligencia”. ¡Uf, ya estoy cansado! Sí, esta lección de matemáticas para topos con problemas de memoria exige acción. De hecho, la palabra diligencia de este caso, viene de donde nosotros derivamos nuestra palabra, velocidad. Pedro dice, en efecto: “Esfuércense por añadir a su fe, virtud; a su virtud, entendimiento; al entendimiento, dominio propio; al dominio propio, constancia; a la constancia, devoción a Dios; a la devoción a Dios, afecto fraternal; y al afecto fraternal, amor. Porque estas cualidades, si abundan en ustedes, les harán crecer en el conocimiento de nuestro Señor Jesucristo, y evitarán que sean inútiles e improductivos. En cambio, el que no las tiene es tan corto de vista que ya ni ve, y se olvida que ya ha sido limpiado de sus antiguos pecados.” Simple.

Y en nuestro texto para esta noche, Pedro sigue diciendo, “esfuércense más todavía”. Pedro utiliza el verbo “spoudazo” en este caso, es decir que, en otras palabras dice: “¡Hey, muchachos! Muévanse más rápido, porque cuando se trata de estar seguros de su llamado y elección, quiero que utilicen sus Speedo”. ¡Claro que sí! Bien podemos parafrasear a Pedro diciendo: “Si su conocimiento y testimonio, si su servicio e historia de salvación presente y felicidad futura son tan ciertos como dicen que son; si es verdaderamente por la gracia de Dios, solo por la fe exclusivamente en Cristo, confiando únicamente en las Escrituras y todo para la gloria de Dios y de nadie más, entonces ¡muéstrenme los productos activos! ¡No! Más que eso, olvídense de convencerme así de su salvación; más bien, ¡convénzanse ustedes mismos! Sí, hagan de su llamado y elección algo decididamente firme en su propio corazón. ¡Háganlo categórico y certero para ustedes! Háganlo todo el tiempo. Sí, que sus acciones les revelen su fe, primero que todo, a ustedes mismos”.

Amigos, el resultado de semejante esfuerzo rápido y consistente, arraigado en aquellos cinco pilares bíblicos, es que van a correr con tanta confianza, que ya nunca más correrán ni se echarán a perder con el trastabille y las torpezas ciegas de los pequeños topos. ¡Y eso es magnífico!

Medita: “¡Que tonto eres! ¿Quieres convencerte de que la fe sin obras es estéril? ¿No fue declarado justo nuestro padre Abraham por lo que hizo cuando ofreció sobre el altar a su hijo Isaac? Ya lo ves: Su fe y sus obras actuaban conjuntamente, y su fe llegó a la perfección por las obras que hizo. Así se cumplió la escritura que dice, ‘Le creyó Abraham a Dios, y esto se le tomó en cuenta como justicia,’ y fue llamado amigo de Dios. Como pueden ver, a una persona se le declara justa por las obras, y no sólo por la fe.” Santiago 2:20-24

Ora: Señor, líbrame de la esclavitud de las obras y ayúdame siempre a asegurar, continua y correctamente, tanto mi llamado como mi elección. Te lo pido en el nombre de Jesús. Amén.

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