Saturday, July 2, 2011

Jul | 02 | Los vampiros de muchas patas.

Palabra para meditar: CHUPADORES

Proverbios 15:2
“La lengua de los sabios destila conocimiento; la boca de los necios escupe necedades.”

Los vampiros de muchas patas.


A principios del año 2007 la estrella de música country Brad Paisley sacó dos canciones muy exitosas. La primera fue: “When I get to where I’m going”(Cuando llegue a mi destino), un poderoso y evocador dúo de música country junto a Dolly Parton. El video producido para esta canción hará derramar lágrimas sanadoras a cualquier persona que haya perdido un ser querido. En la segunda canción, Brad va de lo sublime a lo ridículo al producir una cancioncilla estilo Benny Hill y de mucho doble sentido. El título de esta canción es simplemente “Garrapatas”, cuyo siempre recordado coro dice:

Porque me gustaría verte afuera a la luz de la luna
Me gustaría besarte tus huesitos
Me gustaría pasearte por un campo de flores silvestres
¡Y me gustaría revisarte a ver si tienes garrapatas!

Qué gracioso, ¿no?

Cuando vivíamos en las colinas de Kentucky tuvimos la suerte de tener un par de gatos matadores como nuestros felinos protectores. Ellos sacrificaban la población de roedores y por las noches nos mantenían a salvo en nuestras camas de las bandas de ratas ambulantes y de topos maliciosos que invadían nuestra cocina en busca de alimentos. Por hacer este buen trabajo nosotros les permitíamos que se acostaran con nosotros en nuestra cama donde ronroneaban durante toda la noche.

Desafortunadamente, esos buenos felinos tenían la tendencia a traer a nuestras camas (y por lo tanto a nuestras sábanas) ciertos pequeños viajeros que a menudo se les pegaban a sus pelajes. Tanto mi esposa como yo hemos descubierto a estos pequeños y horribles monstruos enterrados en nuestros cuerpos, literalmente chupándonos la vida. La letra de la lunática canción de Brad Paisley “Quisiera revisarte para ver si tienes garrapatas!” se convirtió para nosotros , por un tiempo, en una necesidad absoluta.

¿Saben?, el problema con las garrapatas y especialmente con las garrapatas de patas negras es que pueden estar infectadas con la bacteria ‘borrelia burgdorferi’, la cual a su vez, se trasmite a los humanos y produce lo que conocemos como la enfermedad de Lyme. Esta enfermedad es particularmente peligrosa porque ataca las articulaciones, el corazón y el sistema nervioso. Es una pequeña y engañadora enfermedad porque sus síntomas iníciales se manifiestan como un comparativamente inofensivo catarro. Debido a esto, la grave naturaleza de la picadura y sus consecuencias pueden fácilmente ser ignoradas y de esta forma dejar en nuestros cuerpos una bomba de tiempo que explotará en los años venideros. Las garrapatas son unas pequeñas y peligrosas sinvergüenzas.
¿Qué acusación que te chupa la sangre, qué condenación que te arranca la vida, qué mentira enfermiza, qué bomba de tiempo han ustedes llevado a sus camas en esta noche? ¡Peligro! ¿Por qué no se toman unos momentos y le piden al Espíritu Santo en esta noche que los revise para ver si tienen “garrapatas”? Entonces, en una confesión en voz baja, con un gentil entusiasmo, con una determinación apoyada en la oración, tomen las pinzas de la Palabra de Dios y agarren por la mitad a esas sinvergüenzas, saquen sus pequeñas cabezas de la piel de ustedes y háganlas trizas entre las uñas de sus manos.

Finalmente, mis hermanos, independientemente de lo útil que sean sus conocidos, de cuán agradable sea su compañía, de cuán confortante sea su presencia, cuando ronroneen por la noche, y si están trayendo garrapatas a sus camas, entonces tienen que irse. ¡El que tenga oídos para oír, que oiga!

Medita: “El que con sabios anda, sabio se vuelve; el que con necios se junta, saldrá mal parado.” Proverbios 13:20 NKJV

Ora: Señor, ayúdame a saber si tengo “garrapatas” en mi vida. Señor, perdóname por permitir que venga gente insensata a mi vida y perdóname por ser un compañero dispuesto para esos parásitos chupadores de sangre. Límpiame en esta noche, oh Señor mi Dios, aunque Tu limpieza me sea dolorosa. Señor, mañana cuando me levante, recuérdame caminar junto a los sabios. Señor, desde ahora en adelante mi habitación es mía y Tuya y nada ni nadie será aceptado entre la blancura de nuestras sábanas. Te prometo esto, oh Señor, te lo prometo, Amén.

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