Saturday, December 28, 2013

Dec | 28 | ¡Sensatez! La ventaja de escuchar la verbosidad de la época

ESCUCHA

Isaías 28:23  
Escuchen, oigan mi voz; presten atención, oigan lo que tengo qué decir.

¡Sensatez! La ventaja de escuchar la verbosidad de la época

“Oh, lo que no haría por poseer la clase de fe que se necesita para saltar del barco en el que me encuentro, sobre las olas. Para salir de mi zona de comodidad e ingresar en el reino de lo desconocido donde está Jesús…” Así dicen las primeras líneas de uno de los cantos más representativos del grupo Cristiano “Casting Crowns” el cual habla en cuanto a su elección de la verdad. ¿Comprenden? ¡Elegir la verdad!

“Voy a actuar de acuerdo con lo que verdaderamente creo”. Las acciones se basan en lo que verdaderamente creemos, en lo que nos impulsa muy en nuestro interior. Esta máquina interna de creencias fundamentales y progresión impulsora, a su vez, está alimentada por palabras, o voces, si lo prefieren, y la voz del corazón a veces hace eco en nuestra cabeza. Amigo, no tienes que estar loco para escuchar voces: Créeme, nos sucede a todos.

Jefes, cónyuges, hijos, parientes, amigos, perros, gatos, la radio, el correo electrónico, el fax, avisos publicitarios en internet, mensajes instantáneos, mensajes de texto, páginas que nos hablan, teléfonos celulares, teléfonos fijos, iPods, DVDs, CDs, banda ancha de internet, emisiones de radio por internet, creación de archivos de sonido y video, la televisión, el video, las noticias, asistentes personales digitales, revistas, telenovelas, películas, periódicos, avisos publicitarios, carteleras, todos ellos son voces, todos están vendiendo o comprando, matándose por un mínimo trozo de tu ya abrumada atención. Las voces se escuchan en todos lados y penetran en todos lados. Estas demandantes voces de ventas, (pues eso es principalmente lo que son) son muy perturbadoras, pero son las otras voces las que nos dañan y nos duelen más.

Por ejemplo, la voz interna de la conciencia, comienza cada día su graznido repitiéndonos constantemente la verdad sobre las leyes que hemos infringido. Sí, esa pomposa ave de condenación, a menudo grazna su acusación, parloteando incesantemente como ‘Polly, el Perico’ exacerbado por la velocidad, hasta que (para el Cristiano), ese gran Pájaro, más grande que nuestros corazones, más grande que nuestras conciencias, esa gran Paloma, ese bendito ‘Paracleto’, baja en picada sobre la escena y ahoga los graznidos de la conciencia, cantando Su canto de perdón amoroso, todavía más fuerte. Aun así, la conciencia puede llegar a ser una voz muy presente y muy turbadora.

Al igual que el graznido, la voz interna desde el lugar de una herida no sanada todavía, puede gritar desde los abismos de esas heridas abiertas, mientras la voz protectora y desconfiada grita “¡Cuidado! ¡Ten cuidado ahora, no dés demasiada información, no confíes, aléjate, escóndete, no reveles, no dejes que vean! Estas heridas profundas, y su guardaespaldas femenino llamado ‘desconfianza’, son voces desde un lugar de dolor, que minimizan y debilitan y que precisan que el aceite sanador y tranquilizador del Gran Samaritano sea vertido sobre ellas, y luego masajeado con amor, hasta silenciarlas. Las voces de las heridas profundas y la auto protección, nos hablan muy fuerte ¿no es cierto, amigos?

Además, las voces de las declaraciones internas y las maldiciones que nosotros mismos hemos puesto sobre nosotros pueden parecer como oficiales de seguridad armados, bruscos y que no nos escuchan, ordenándonos que ‘paremos y desistamos’ de la libertad y de cualquier intento de cruzar el perímetro vallado contra la sinceridad y la posibilidad de buscar a alguien y pedir ayuda, otra vez. Estas voces de seguridad no nos escucharán; ellas sólo hablan en voz alta, protectora y orgullosamente.

Por último y lo más desconcertante de todo para nuestros oídos internos, son las voces demoníacas, a las que hemos permitido reírse y mentir por las ventanas que hemos abierto o las puertas que tenemos resquebrajadas. Ellas se escurren hacia adentro por nuestras debilidades y se paran en el terreno perdido predicando mentiras, contando historias desconcertantes e interrumpiendo cualquier pensamiento santo.

Ahora, la fe aún necesita el combustible que brindan las palabras, (las voces para ponerlo en acción) pero si estas otras voces hablan fuertemente, nunca permitirán que la fe florezca. Entonces sí, con todo lo que hemos escuchado hoy, necesitamos tomar el consejo de Casting Crowns de manera activa y “elegir escuchar y creer en la voz de la verdad”. Verán, hay una ventaja al escuchar la verbosidad de la época y esa ventaja es esa sustanciosa claridad, sí, es como la sensatez mental. Por lo tanto, asegúrense de adentrarse en la Palabra de Dios en este año que ya casi comienza y de que la Palabra penetre en ustedes. ¿Tienen ya su plan de lectura listo para comenzar el 1ro de Enero? ¿No? Pues entonces prepárenlo amigos... ¡prepárenlo!

Reflexiona: “¿Porqué no entienden mi modo de hablar? Porque no pueden aceptar mi palabra.” Juan 8:43

Ora: Señor, el diablo tiene en su potestad la capacidad de hacer que los oídos se vuelvan sordos a Tu Palabra. Señor, ahora, y en este año que se avecina, planta una semilla de deseo que se convierta en un árbol de satisfacción plantado al lado de aguas que estén siempre brotando, con diez mil oídos abiertos, todos atentos a Tu voz de verdad. Te lo pido en el nombre de Jesús. Amén.

 

No comments:

Post a Comment